Hace algunos años, tres hermanos partieron de su pueblo en busca de trabajo a la ciudad. Todos ellos encontraron trabajo en la misma compañía, empezando con el mismo sueldo.
Dos años más tarde, uno percibía un sueldo de $100.00 dólares mensuales; el segundo, de $200.00 mensuales; y el tercero, de $300.00 dólares mensuales. Su padre, al darse cuenta de esta diferencia, decidió visitar al patrón de sus hijos y averiguar la razón de esta diferencia, lo que a él le parecía injusto. El patrón escuchó al confuso padre, luego, volviéndose le dijo:
- Dejaré que los muchachos se expliquen por si mismos.
Llamó al de sueldo más bajo y le dijo:
- Juan, tengo entendido que uno de nuestros barcos acaba de atracar. Por favor, ve al muelle y toma el inventario.
Tres minutos más tarde, Juan regresó a la oficina:
- Tiene una carga de 2000 pieles de nutria. - Reportó. - Obtuve la información llamando al capitán por teléfono.
Tan pronto se fue Juan, llamó al segundo hijo, Pedro, y le dijo:
- Quiero que vayas al muelle y obtengas el inventario de carga del Oceanic.
Una hora después, Pedro estaba de regreso en la oficina con una lista que mostraba que el Oceanic no sólo llevaba 2000 pieles de nutria, sino que también 500 de castor y 1100 de visón.
Jorge, el de mayor sueldo, recibió las mismas instrucciones que sus hermanos. Partió y regresó mucho más tarde de la hora del cierre y reportó:
- El Oceanic lleva 2000 pieles de nutria. - Comenzó - Está a la venta por $5.00 dólares cada una, por lo que me tomé la opción de dos días, y he contactado a un cliente en San Luis, ofreciéndole las pieles a $7.00 dólares. Espero recibir el pedido mañana. También encontré 500 pieles de castor, las cuales vendí por teléfono con una ganancia de $700.00 dólares. Los visones eran de mala calidad, por lo cual no traté de hacer nada con ellos.
Al partir Jorge, el patrón se volvió hacia el padre y sonrió.
- Habrá notado - le dijo - que Juan no hace lo que se le pide. Pedro hace únicamente lo que se le pide; y Jorge reacciona de una manera proactiva buscando el mayor beneficio para la compañía, va mucho más allá de las instrucciones recibidas.
Los ejecutivos de promoción tienen que ser como Jorge. Saber apreciar el valor de ser una persona proactiva, deben de buscar toda oportunidad si desean avanzar en su carrera. Uno no se puede estancar por sus propios temores, tiene que accionar buscando el crecimiento de su escuela, debe de saber que las oportunidades no llegan, se crean y estas se aprovechan al máximo cuando se está preparado.
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